En un nuevo golpe de efecto, Mrs. Marilyn
Hackenbush acaba de contratar como profesora de tiro y esgrima de GHI a Annie
Laurie Starr, la Incomparable Campeona del Mundo.
Todos los huéspedes de GHI se han matriculado
ya en sus clases, excepto nuestro veterinario. Se imparten en la playa chica, y
los días de lluvia en la sala de billar, ya que las nuevas mesas son
portátiles.
Recientemente, Annie Laurie derrotó en el
tiro con arco al surcoreano Im Dong-Hyun, superando en 8 puntos su récord
mundial de 699. Y encima, disparó con los ojos vendados.
Nada más llegar a GHI mostró a nuestros
huéspedes lo que había aprendido de Balbet, el legendario y ya retirado campeón
de pistola y espada, con quien veraneó en Montevideo. Balbet incluso le ha
regalado a la joven artista su fusil Gras y su florete mecánico. Y como el buen
discípulo supera al maestro, Annie Laurie no necesitó de 24 sino de solo 21
tiros de su carabina para separar la clara de la yema del huevo que había sido legítimamente
cocido por nuestro chef francés, como mostró la propia Lady Hackenbush al
apretarlo en sus manos al final, para mostrar su perfecta liquidez. Ni que
decir tiene que ni un solo rasguño podía detectarse en la yema.
Desde la isla de Tongatapu, nuestro ex
Gerente ha querido matricularse en las clases de Annie Laurie. “Iré también –ha
declarado– a las de tiro al plato y a las de tiro de pichón. Y aprovecharé para ponerme al día con GHI y para asistir a la lectura del nuevo
libro de poemas de José Duna, Sanatorio San Antonio”.
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| Nuestro amigo el artista Jorge Camacho nos ofreció algunas de sus dianas |
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| El septeto femenino de nuestra Gerente interpretó en la gala de bienvenida el inmortal "Annie Laurie" |
Reportaje fotográfico: Man Ray
Espero que el equipo de seguridad al completo se apunte a las clases y mejore su puntería. Las últimas intervenciones han sido penosas, ni disparando al aire consiguen acertar.
ResponderEliminarQuinlan anda con la mosca tras la oreja, por si esta Annie Laurie Starr oculta algo tras su trabajo de profesora de tiro.
ResponderEliminarSí, y también dicen que Long John Silver ha desistido de atacar las playas de GHI, al enterarse de esta noticia.
EliminarYo por Annie Laurie voy al fin del mundo.
ResponderEliminarYo he reservado ya una habitación por cinco años.
Eliminar¿Sabían que el propio Robin Hood aprendió a disparar con Annie Laurie?
ResponderEliminarHombre, ya eso me huele a chamusquina. Solo si lo confirmara Mil Pessoas.
EliminarResucitan en mí viejos y cálidos recuerdos, cuando, viviendo yo en Nottingham junto a mi primera amada inglesa, me encontré varias veces a Robin por el bosque de Sherwood, disfrutando grandes aventuras. Fue, por cierto, mi amada inglesa (la segunda), instigada por mí, quien ablandó el corazón de Ricardo Corazón de León para que indultara a Robin.
EliminarPero esta guapa Annie Laurie, aunque tan buena arquera como él (yo también hice mis pinitos, por mucho que mi arma de siempre haya sido la noble espada), me parece demasiado joven. para eso.
Supongo que el alumnado de esta señorita pasará previamente algún tipo de prueba psicológica que verifique un estado mental apropiado para el manejo de armas, ¿no?
ResponderEliminarVeo que nadie dice nada al respecto. Sospechoso, cuando menos...
EliminarYa me gustaría a mí matricularme y así estar cerca de esta señorita tan guapa, pero no me lo permite el juramento que hice en favor de mi señora Lady Hackenbush. Por cierto, el doctor Gary nunca se ha negado a firmar cualquier documento que me hiciera falta.
EliminarAyer comentaba con mis antiguos camaradas ESGHI mi preocupación por el peligro que corría mi señora Lady Hackenbush como directora de GHI a causa del órdago que Armando Azar había lanzado al mundo desde China. Cuál no sería mi sorpresa cuando me aseguraron que la agencia de prensa de GHI había pasado a manos de ese impresentable señor del bigote pintado; que estaba boicoteando todas las noticias acerca de GHI y que, no contento con eso, se apropiaba a su antojo de las informaciones llegadas a la redacción de GHI firmándolas con el más completo descaro. ¡Hace ya tiempo que AA denunció esta desfachatez y no le hicimos caso!
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